viernes, 29 de marzo de 2013

Oportunidades..

La vida no siempre marcha como uno espera. Uno se lleva grandes decepciones en el camino de la vida. Luchamos por mantener la fe, por anidar la esperanza y que esta nunca caduque; es el motor, lo que nos impulsa a seguir.
No quiero renunciar, me niego hacerlo. Nunca me enseñaron a rendirme, pero tampoco a seguir. Siempre he querido seguir ese impulso, que le da fuerzas a mi corazón. He alimentado siempre que me quedan energías  ese deseo de continuar, y no dar por sentado mi futuro o lo que esta por venir pronto, e incluso aquello que me espera a la vuelta de la esquina.
Quiero llorar, pero me avergüenzo ante lo que me rodea. Mis lágrimas no merecen ser burladas por los perjuiciosos que deambulan en mi camino por pura desgracia, o quizás con otra razón.
Como no apesadumbrarse ante el hecho de hayas invertido todo de ti ,en dar lo mejor para algún momento, y darte cuenta de que no valió de nada?.
Las oportunidades se pueden ir en un día  un minuto e incluso menos. Ve siempre corriendo tras de ellas, y si te tropiezas en el momento con una, súbete rápido a ese tren y no lo pierdas. Ese no va a regresar más.
Cada lagrimas que despidas de tu mirar, que sea una razón más para ser fuerte, y no para debilitarte.
En la vida aprendemos que nadie esta por otro. Obviemos las excepciones. ¡Pues cada quien quiere labrar para lo suyo, no para lo de otro!.
Todos tenemos sueños, y ciertamente mucha gente lo hace más fácil  pero no hay que llevarnos por nadie, porque lo más importante es ir por lo nuestro. Nunca andes desarmado(a). Ponte tu armadura y ve a librar todas las batallas. ¡Consigue lo que quieres!.
Te deseo suerte en lo que sea que quieras lograr.

jueves, 28 de marzo de 2013

Despedidas...

Un millar de tristezas. Una tras de otra. La vida no se detiene, sino que sigue con paso firme. En un segundo pasan innumerables situaciones. Se ven finalizadas las vidas, se ven marcadas otras que quedan aún de pie ante la lucha.
Cada adiós que nos pronuncian desde el cielo lo lamentamos más. El corazón se desgarra. Quedamos sin fuerza, sin aliento, sin ese brillo en los ojos. Decae la esperanza.
Vamos deprisa, sin poder siquiera respirar. Vamos como a quien se le agota la vida. Vamos con la esperanza a costa.
Pensando en que tenemos un pie en la tierra, y otro en la tumba. Todo es incierto. Nuestra vida se apaga. Ya sin morir, estamos sin vida.
Tenemos miedo. Queremos ser eternos. No queremos irnos sin finalizarlo todo con broche de oro.
Tenemos perder a quienes quedan. Estamos perdiendo quienes queremos, y nos aterra terminar perdiendo lo que amamos.
La muerte no avisa. Viene sin aviso. Luciendo justa o injusta. Nunca faltan las lagrimas, lamentos.
Quedan los recuerdos, los momentos intactos, las palabras dulces, y porque no unas cuantas amargas?.
Transcurre una película vivida con esa persona. Varios fotogramas unidos que forman toda la historia. Mientras más nos hayamos involucrado, más nos duele.
Ausencia de vida. Millones de historias. Sonrisas, tristezas, sueños. Tanto que falto, tanto que se vivió.
El corazón va quedando con un huequito más. Queda mantener viva a esa persona siempre en nuestro corazón.